Grandes detalles

"A veces la vida sólo da problemas. Problema tras problema, no deja un minuto de paz y tranquilidad. Cuando parece que no hay salida, que la vida no va a dejar de presionar, es que hay que darse cuenta de cuáles son las cosas buenas. Los problemas están ahí y no van a desaparecer como si nada. He aprendido que es mejor dejarlos a un lado, sin olvidar su importancia. Cada día está lleno de detalles que hacen que todo valga la pena. Esos pequeños momentos en donde es fácil darse cuenta de quienes son las personas verdaderamente importantes. Esos momentos en los que la vida parece perfecta, aunque sea por un mínimo fragmento del día. Esos momentos en donde todo lo demás es insignificante. Esos detalles que hacen cada día diferente, que se salen de la rutina. La vida nunca dará un día sin esos detalles. Por más negro que parezca, cada día tiene algo que hace sonreír, que permite ser feliz. He aprendido a mirar esos detalles y a vivir en función de la gente que me importa, la gente que quiero. Los problemas están ahí y no se van a ir por estresarse. Es importante concentrarse en ellos y en solucionarlos, pero hay que pensar qué es realmente importante, la felicidad. Lo principal, para mí, es la gente que hace importantes esos pequeños momentos, la gente que hace todo valer la pena. Esa es mi prioridad, lo demás es secundario, y quiero vivir en función de esos grandes detalles."  -Anónimo.

¿Por qué los sentimientos son tan valorados?

Pensando en la teoría del filósofo inglés Hume, las percepciones que experimenta el humano se pueden dividir en "impresiones" e "ideas". En palabras más sencillas, el hombre siente cosas en un determinado momento (impresiones) y en un futuro reflexiona, recuerda y piensa sobre ellas (ideas).
Un importante corolario de tales definiciones radica en que las impresiones son más 'fuertes' que las ideas. ¿En qué sentido más fuertes? Si yo me golpeo con la mesa, el dolor de tal impresión será bastante fuerte, sin embargo si en 3 años recuerdo el golpe, el dolor que experimente en tal idea será mucho menor al experimentado en la impresión.
Dolor físico, sorpresa, cansancio, pereza, nervios, entre otros, son impresiones de un instante que, aunque fuertes en su momento, disminuyen durante el pasar del tiempo. Sin embargo el amor, odio, felicidad, tristeza y similares no funcionan según el mismo criterio, ya que pueden perdurar en el tiempo y, tristemente, la fuerza de la impresión no es mayor a la de la idea. Poniendo un ejemplo concreto: si yo estoy enamorado y en algún momento veo a la persona que amo y siento "amor", la impresión será bastante fuerte. Si sigo enamorado, después de un determinado momento, puedo recordar la imagen de la persona que amo y, curiosamente, la idea de la persona tendrá la misma intensidad o fuerza que la impresión: el "amor" se siente igual.
He ahí el problema: los sentimientos perduran en el tiempo porque son procesos mentales duraderos y no físicos de un momento inmediato, son ideas que no pierden intensidad con respecto a las impresiones y, por lo tanto, son algo especial a lo cual el humano da demasiada importancia, a veces en exceso.

Feliz cumpleaños, Chelsea FC

Hoy, 10 de marzo de 2012, se conmemoran 107 años de la fundación del equipo de mis amores, Chelsea Football Club. Son 107 años de historia, tradición, hinchada, leyendas, felicidad; y, aunque los sigo desde hace mucho menos que 107 años, siento que hago parte de la historia del club. 
Tal vez ni el dueño, ni el presidente, ni los jugadores saben quién soy, pero yo quiero decir "gracias".
Gracias por tantas alegrías, gracias por tantas tristezas, gracias por tantas emociones. Gracias por darme aunque sea 90 minutos para olvidar mis problemas, gracias por traerme más problemas. Gracias por darme un camino hacia conocer gente maravillosa, gracias por darme un camino hacia conocer gente con la cual debatir, gracias por abrirme los ojos y hacerme notar quien no vale la pena. Gracias por enseñarme tanto de fútbol, de valores, de la vida en general. Gracias por ser mi equipo. Gracias por ser mi vida. Gracias por ser tan especial. 
Feliz cumpleaños, Chelsea Football Club.